Ciclo Locales: Una cruda y satírica crítica social en tres obras cortas de teatro

Escrita por Emanuel Piccioni y Fidel Passini, el ciclo y la puesta en escena por el mismo elenco en el teatro Hypókrites propone distintos rubros y locuras que suceden en locales de un barrio, regresando con una segunda temporada todos los sábados de agosto a las 22hrs.

SABADOS DE AGOST | CnE
¿Qué pasa realmente en los locales de tu barrio?
Hypókrites lo descubre mediante 3 obras cortas que nos pasean por distintos rubros y locuras.
Una peluquería venida a menos con un dueño poco avispado, una remisería con extraños emprendimientos paralelos y un café con clientes no más peculiares que su mozo, son apenas los inicios de un ciclo lleno de humor, sátira y locura”.

 

El ciclo de obras de teatro independiente aprovecha sus flaquezas del nivel de producción amateur y las usa como elementos de alivio cómico ante el serio y dramático tema puesto sobre la mesa.

Esto sucede con los rellenos para panzas, las respuestas inentendibles en diversos tonos cómicos de las llamadas telefónicas, la supuesta droga e incluso un muñeco, también relleno.

En definitiva, convierte las posibles flaquezas en sus máximas virtudes.

 

Aquello a lo que llamaríamos coloquialmente “bizarro” (si bien su definición real alude a la valentía) es empleado como un recurso a favor de la obra adrede, beneficiándose y enriqueciéndose.

Al mismo tiempo, lo que requiere mayor producción, como el maquillaje y las caracterizaciones de los ancianos en la obra final, consigue mostrarse realista y profesional.

Incluso un mismo recurso, como las pelucas, pudo ser empleado de las dos formas con igual eficacia.

 

Se trata de un equilibrio entre los materiales precarios cómicos y los profesionales realistas que aportan ese tono serio que de vez en cuando necesita.

 

El guión y las interpretaciones buscan que los personajes puedan reflejarse con la realidad cotidiana y que los espectadores los vean como verosímiles.

Es decir, que esos locales y ese barrio puedan ser tranquilamente los de uno mismo, más allá de las situaciones extremas, fuera de lo común y por ello mismo atrapantes que se presentan.

En este sentido, cabe destacar las actuaciones flexibles con cambios de vestuario y tonales en las voces, hasta improvisaciones que disfrazan los posibles accidentes que pueden ocurrir en el escenario.

 

Entre cada obra un par de actores del elenco realizan una presentación intrigante o un número cómico.

Es una gran idea para disimular la puesta en escena que realiza el resto del equipo en el fondo.

No obstante, se desaprovecha el potencial de este recurso de desvío de la atención del público aclarando los mismos actores lo que realizan.

De esa forma, exponen la maniobra y esta pierde su magia.

 

Si bien la producción mantiene un leve tono amateur, los juegos de luces (blancas, rojas y azules) según los estados de ánimo de los personajes aportan a la ambientación e inmersión del público.

También ocurre con la interacción activa de los actores y actrices con los espectadores, interactuando con ellos, mirándolos y rompiendo la cuarta pared.

 

Hay que resaltar los temas tratados, desde las clases sociales hasta el abuso del poder policial y la correlación sútil entre las obras.

En unas obras se mencionan los negocios de las demás, funcionando como un estilo de multiverso coherente y cohesivo.

A su vez, las bromas con humor negro representan la cruda realidad, la vejez, la venganza, incluso crímenes como el robo, el asesinato y la mentira.

 

La primera obra dinámica se ubica en una peluquería y se llama “Hasta los pelos”.

La trama se basa en un peluquero llamado Rubén que asesina a un cliente por error en un ataque de locura.

Junto a su esposa, intentan encubrir este asesinato mientras el oficial de policía Gutiérrez pide un corte de pelo.

 

El punto fuerte es el rápido enganche y estado de complicidad que genera la situación.

Esto se potencia con su comienzo en la oscuridad, acentuado por los dramáticos gritos del peluquero y el apoyo incondicional de su esposa.

 

La actriz logra concentrar la ira y el actor, el nerviosismo a flor de piel. Gutiérrez rompe esa tensión entre ambos personajes dada la situación límite.

Se trata de un policía estereotipado como vago, corrupto y machista con puros chistes de doble sentido. Es la personificación del humor negro ideal como una dura crítica a este rubro del eslabón social.

 

Las interacciones entre el peluquero y Gutiérrez se mantienen entretenidas y amenas.

Son acompañadas por los gestos e intentos de esconder el cadáver de la esposa del peluquero.

Este paralelismo ofrece un contraste cómico que ayuda a descomprimir la tensión.

 

Si bien puede ser un arma de doble filo, porque se dispersa la atención, también rompe con el esquema de un solo diálogo central tradicional y vuelve más dinámico el desarrollo de la escena.

 

La segunda obra corta transcurre en una remisería, titulada “Acá está lo tuyo”.

Sandra, la secretaria del local, lidia con una anciana que espera a que Don Hugo la lleve, con Cachito y su hijo adicto, un vagabundo que delira testarudo y durmiente, el policía Gutiérrez, el dueño judío de la remisería y su intento de negocio paralelo de “fragancias”.

 

Más allá de la diversidad de personajes que se presentan, el mensaje que cala hondo es la explotación laboral de la clase media y el sedentarismo al que acostumbramos en las sociedades capitalistas.

Y por supuesto, el problema del consumo de drogas, su venta y compra ilegales y del narcotráfico como respuesta a los pocos ingresos y sus consecuencias.

 

Cabe destacar la versatilidad de los actores y actrices para interpretar tan variados roles con tanta calidad.

 

Por último, pero no por ello menos importante, la tercera obra posee como espacio una cafetería. Es “Café conflicto”.

Dos señores mayores se encuentran allí. Uno ellos quiere vengarse del maltrato del otro, de Eduardo, cuando era joven.

Ahora él tiene problemas seniles de pérdida de la memoria y cuando el otro personaje le muestra un maletín donde afirma tener una bomba, Eduardo se ve obligado a decidir no solo su destino, sino que también el de los presentes en la cafetería y el de aquel peligroso artefacto.

 

Esta es una historia de venganza, donde la decisión de Eduardo demostraría si sigue siendo la misma mala persona o si realmente hubo un cambio en él.

¿Las personas pueden convertirse en mejores personas o lo único que cambia es el número de la edad?

Este claro dilema se centra en la esencia del humano y el karma que, tarde o temprano, llega en la vida.

 

Entre el humor y la simultaneidad de acciones que ocurren detrás de la barra y con el payaso vendedor de joyas falsas, “Café conflicto” es una enseñanza.

Es una lección que uno de los personajes decide hacer justicia por mano propia.

 

El único cabo suelto que hubiese sido interesante explorar es el porqué de la venganza, ya sea con un flashback de su juventud o alguna explicación más concreta.

Aun así, la ambigüedad delega a la imaginación del espectador elegir aquella razón que prefiera por la cual un personaje se vengue de otro.

 

Las primeras dos obras tienen en común el quiebre y estallido de enojo de los personajes femeninos, al igual que el descontrol del escenario que lo demuestra.

 

Una vez que termina la obra, se vuelve a ordenar para la siguiente, dando la apropiada sensación de un reinicio, de una nueva historia por venir.

Es importante recalcar el máximo compromiso y colaboración de todos los actores y las actrices en escena para desarmar y rearmar los escenarios de cada una de las obras.



Lo mismo ocurre con la relevancia del apoyo al teatro independiente, por lo general hecho a pulmón como este caso y creado con pura pasión teatral.

Esta es la forma de arte más auténtica y valiosa, por lo cual es crucial preservarla, conservarla, cuidarla y protegerla.

El gesto amable y simpatizante de agradecer de parte del elenco a la audiencia por su apoyo en la actual situación económica del país lo refleja a la perfección.

 

La agrupación actoral presentará funciones a la gorra de estas tres obras de sátira, humor y drama en septiembre de este año, 2024.

 

“Ciclo Locales” es un viaje de exploración de temas profundos a través de escenarios cotidianos y personajes excéntricos interpretados por un destacado elenco versátil con un humor único y disparatadamente ingenioso.

360 F 298166355 BvfU0450lPRi51CNc2DKaPiEuujvn5Op | CnE
 
Más reseñas de teatro acá.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

es_ARSpanish