En “Los reyes de la casa”, la autora francesa busca concientizar sobre la sobreexposición en redes, la explotación infantil y cuestiona una falsa felicidad.
Este libro es una mezcla entre policial con ensayo sociológico en el que se encarga de retratar las consecuencias de la era digital que estamos atravesando, con un universo de ficción, cercano a la realidad, en donde la constante validación en las redes se vuelven en contra y pueden provocar un crimen.
Nos cuenta la historia de Mélanie Claux, ella tiene dos tareas: ser la madre de los niños Kimmy y Sammy y dirigir el Happy Break, un exitoso canal de YouTube, que es el principal ingreso, dependen del número de visitas y los patrocinadores que tengan sus videos. Ella no tiene limites, utiliza cualquier ocasión privada para generar contenido para las redes sociales y asi tener una conexión cercana con sus seguidores a través de sus hijos.
Todo cambia cuando su hija Kimmy, la estrella del canal, desaparece sin dejar rastro y todo apunta a que haya sido secuestrada. Comienza la investigación policial, encabezada por Clara Rousel, una de las mejores agentes de policía. A medida que avanza en la investigación, se dará cuenta del mundo digital que le cuesta entender y creía inocente, un mundo donde todo es mercancía y se gobierna a través del ego. Clara se da cuenta como Mélanie retransmite cada paso que se da en la vida sus hijos y como ellos no tienen respiro de exposición, no conocen la privacidad.
“Los reyes de la casa” analiza diferentes fenómenos del momentos ,la televisión hizo posible que personas desconocidas despertarán el interés público y alcanzaran la fama como por ejemplo en formatos como Gran Hermano. Se cuestiona algo con lo que convivimos, existen cada vez más canales centrados en familias con millones de seguidores que deciden exponen su vida y la de su familia. ¿Valen la pena los seguidores pagando un precio tan alto?
Por Andrea Baez
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