Urano, Neptuno y Saturno son tres puntos a tener en cuenta a la hora de encarar los tránsitos astrológicos con anticipación y sabiduría para ordenar el año que se viene.

Por Belén Puigbó
Empecemos anotando fechas importantes, Neptuno se mueve al signo de aries el 26 de enero de 2026, Saturno también se va al signo de aries pero el 15 de febrero de 2026 y por último Urano entra en géminis a partir del 25 de abril de 2026.
Mirando los tránsitos actuales entre el 30 y el 31 de diciembre, estamos entre los últimos grados de Urano en tauro, Neptuno y Saturno en piscis. Lo que da la pauta de que evidentemente es un fin de año para hacer limpieza significativa, porque cuando un planeta está pasando por los últimos grados de un signo, el cambio es inminente y potente, es decir, es imposible no sentirlo.
Por lo tanto, con esta información lo que queda es organizarse y no asustarse ni abrumarse. Muchas veces sentimos ganas de un cambio pero lo que nos cuesta es aceptar ese cambio, nos apegamos a momentos, personas, rutinas y a tu viejo yo. Con Urano saliendo de tauro lo ideal es que te anticipes para que vos decidas moverte y no que la energía te someta a ello. Pero te repito, no te asustes, esto es necesario y lo sabes.
Tauro es la estructura, la tierra y lo estable, urano allí propone limpiar la tierra para volver a sembrar, y es ideal hacerlo a consciencia. Por ejemplo, cuando vienen a tirarse el tarot conmigo siempre les digo que no creo en las predicciones, creo en la fuerza de cada uno para decidir su destino y que nadie les diga lo contrario, no se quiten poder. Entonces mi consejo es que preparen su propio terreno, hagan examen de consciencia, sean sinceros con ustedes mismos y pregúntense que quieren cultivar para los años venideros, y por sobretodo, qué están dispuestos a dejar para hacer espacio. Sé que no es fácil, pero no es imposible.

Neptuno en piscis nos enseñó a soñar, a tener ideales, a ilusionarse y a trabajar la espiritualidad. Con Neptuno pasando a aries, esos sueños deberían convertirse en propósito, pueden volverse realidad. Aries es impulso y movimiento, pero la buena noticia es que Saturno, planeta de los límites y estructuras, también se va para aries. Esto se traduce en, no solo tenes la energía para moverte por aquello que deseas, también va a ser un sueño bien estructurado, un sueño que si está bien desde las bases va a poder sostenerse en el tiempo. Pero, si Saturno está allí, hay que trabajar, hay sostener y madurar, y, lamentablemente no todos están dispuestos a eso. Vos elegís.
En este momento estamos transitando sol, marte y venus en capricornio, que nos habla de energías maduras, concretas, frías y de liderazgo. Es un excelente momento para organizar tu mente y tus ideas. Que tus próximos pasos estén alineados con vos pero que también sean planificados. No usemos la astrología para lo banal, para asustarnos o para la frivolidad. Utilicemos esta herramienta para organizarnos, para encarar con conciencia nuestros próximos movimientos.
El 6 de enero se da una conjunción entre venus y el sol en capricornio, podría hablar de materializar lo que soñamos pero hoy decido decirte, planifiquemos nuestros sueños. Demos forma a una realidad posible. Soltemos ilusiones y con ello la inmadurez. Somos los que manejan el volante del auto, tomemos las decisiones que nos lleven a mejor destino.

Los invito a aprender sobre su propia carta natal, porque si saben en qué casas cae cada tránsito pueden organizarse/planificar mucho mejor.
Les deseo un gran cierre de año y un comienzo más que espectacular. Amo acompañarlos desde acá.
Pueden seguirme en mis redes en @beliylasestrellas.
Abrazo de estrellas.
Beli.
Más notas de Belén aquí



