Crítica no especializada
Editorial Julio Crítica
¡Volvimos!
Un día como hoy, pero del año 2020, frente a lo ocurrido a una pandemia que parecía ser eterna, personas como yo decidieron poner pausa a sus actividades no menos importantes pero secundarias económicamente hablando (esta revista Critica no Especializada), para dedicarnos a proyectos en los que ya somos rentables; en mi caso producción y gestión de contenidos multimedia y trasmedia para terceros.
Ya que es más que obvio que esta no es mi actividad principal (todavía…), si no, más una pasión que deseo compartir en cada momento que puedo con ustedes siempre que es posible.
Otro de los motivos es que, así como muchos y muchas paramos nuestras actividades menos importantes (pero sí económicamente), la mayor de las industrias del entretenimiento también; el cine, con todo lo que eso conlleva, premieres, eventos, filmaciones, avances, producción audiovisual en general, la industria tuvo que adaptarse a otra forma de trabajar con menos gente, tiempos mas largos de producción, y por supuesto achicarse a nivel mundial donde solo, (como siempre también) los grandes tanques pueden sobrevivir, así poniendo ellos las nuevas reglas este juego cada vez más tirano e indirectamente salvaje.
A nivel mundial, la sobre conectividad de nuestra vida se impuso el streaming por sobre todo, en redes sociales, nuestro trabajo y nuestro entretenimiento para bien o para mal. Y en el entretenimiento Netflix sigue teniendo la batuta, por ser actualmente la plataforma más vista y visitada en el mundo y es quien marca la agenda en cuanto a ficciones generando contenido propio muy bueno, pero a veces cayendo el cliché por sus famosos algoritmos de cómo ven los usuarios su contenido. Otras empresas ya están están activando seriamente sus canales virtuales, como una fuente potable para nuevos fans; Amazon con Prime video, quien secundó Netflix desde el primer momento comenzando producciones para cine muy atractivas y con una visión anti-hollywoodense (pero no indie), audaz, producto de una nueva generación de cineastas. Dejando en tercer lugar a HBO MAX, que si bien HBO siempre fue pago y estaba dentro de nuestra programación de cable como una opción premium por su alta calidad en contenido, parece que no logro ser lo suficientemente seductor para atrapar a las nuevas generaciones o “no la supo ver” a tiempo, ya que si bien fue precursor en muchas vanguardias televisivas en internet se quedó viejo. Y quien viene acercándose con pasos seguros y agigantados es al parecer a mediano plazo la verdadera competencia de Netflix sin dudas, Disney Plus, que poco a poco fue comprando a su competencia y posible por las dudas, tanto que básicamente no sabemos que pertenece a Disney que no, esta verdadera industria del entretenimiento en plena pandemia, desarrolló y llevó a cabo esta nueva plataforma para ver contenido original de su producción y por un extra, ver películas que en este momento estarían proyectándose en los cines (Cruella) o de forma hibrida (Black Widow), Sin dudas no va a pasar muchos tiempo para que Disney sea un nuevo sinónimo “de que se puede ver hoy en casa…Disney and chill?”. Luego los demás; Fox+, Claro video, Blim, Tubi, Hulu, Apple TV, Paramount plus y la lista sigue… Todos compitiendo por nuestra atención, ¿no es tierno?
Pero ojo, en Argentina nunca nos quedamos atrás y también tenemos nuestros propios productos streaming, si bien ahora por disposición del MSCI aparecemos en las economías “solitarias” (o sea menos atractivas del mundo para inversiones financieras), a la par de Pakistán, el Líbano, Trinidad y Tobago, entre otros países que solo conocemos sus nombres por sus catástrofes, somos a su vez el país con el comercio electrónico de más rápido crecimiento en el mundo desde el 2020, convirtiéndonos en un Titanic eterno navegante de aguas calmas en medio de tormentas tropicales. Amo mi país.
Cine.Ar fue la primera plataforma streaming argentina, en principio creada para incentivar argentinos y argentinas a mirar más cine argentino (muy bastardeado por el popular argentino, como siempre), adaptándose como pudo a las múltiples disposiciones legales gubernamentales que tuvo el cine en todos estos años, consolidándose como una plataforma gratuita bajo suscripción de usuario, pero con estrenos pagos por el módico precio de 30 pesos por película (increíblemente económico y accesible). Qubit TV de operación en Argentina y Uruguay, y también productora de contenidos, que en solo 7 días de prueba gratis quieren que te enamores de ellos, como Paramount + (que me suena a pelis para mi abuela), creo, se podrían jugar con un par de días más, ¿no? Prime Video nos regala un año (no escatiman a la hora de seducirnos) y Disney plus, 3 meses, que aún sigue siendo negocio y bueno HBO MAX solo un mísero 50% off.
Y por último, un startup argentino que va llegar para quedarse; +Vivo que según La Nación estrena streaming en septiembre de este año y su punto fuerte va a ser la calidad en video y sonido de su contenido, así que veremos…
A lo que no podemos sacar merito en este mundo de la virtualidad y creció de manera desorbitante, fue el consumo de videos juegos en todas las plataformas y junto con eso, la popularidad de juegos simples y colaborativos (Among us), donde ya no buscan un público objetivo sino a todo el grupo familiar, que no se inquieten por un diseño simple y hasta brusco con resoluciones o desenlaces cortos. Una nueva estrategia para que los desarrolladores se despejen un poco del nicho geek que los tiene tan acostumbrados y atormentados. Sumado a la vez, a la cantidad de personas que decidieron librarse al azar de las criticas en el mundo de internet, para hablar de sus propios puntos de vista, e incluso crear canales de opinión muy bien producidos como es el caso de Twich, que comparte el mercado de una forma bastante simbiótica con Youtube (hay que ver cuánto dura esto) y otros en los que hay de todo (TODO, TODO), como Tik Tok. Así abrirnos más a la democratización del contenido que deseamos ver o simplemente crear el propio, quedando la televisión por cable/aire como lo que siempre fue, pero ahora vemos con más claridad… una caja de eco en si misma cerrada y mezquina, generadora de programas basura que repercuten entre sí, solo para lo que fue creada; vender a través de publicidad cada 20 minutos de supuesto contenido.
¿La buena noticia de este Julio donde se abren las restricciones a cuenta gota? Es que vuelve el cine al mundo también a Critica, ¡sí! Pero todavía no hay que ser tan optimistas, ya que no sabemos si vuelve para terminar de cerrar las ultimas salas que quedan abiertas y convertirlas en templos evangélicos o para que este séptimo arte sea disfrutable en la pantalla grande para unos pocos, ya que si bien abrieron muchos espacios públicos, el contacto estrecho con extraños sigue estando “prohibido” y más en espacios donde puede haber mucha afluencia de gente, así que en las salas va a haber mas espacios clausurados que permitidos y por lo tanto es natural que se encarezcan las entradas para ver las películas de estreno y a la que le ponemos todas las fichas y decidimos gastar unos mangos, igualmente todo es cuestión de tiempo para que volvamos a amontonarnos en una fila, asistiendo a algún espectáculo o simplemente compartir espacio con otros y otras en cualquier lugar. En cuanto al famoso y retro autocine y su intento volver (antes un montón de veces más), ante la pandemia, nunca se logro instalar realmente para quedarse y solo es una atracción de que por ahora solo podemos disfrutar por temporada, por su falta de practicidad o el gran espacio que deben ocupar, dejamos esa reflexión para un futuro próximo y más a la arquitectura que a disposiciones legislativas donde los espacios cerrados sean más habitables para más personas.
La real buena noticia en Critica, (que decido decirles al final, siempre al revés), es que volvemos, (¡Wii!), así es, con un aire cambiado pero la misma esencia de un medio que se sostiene solo y piensa hacerlo sin límite de tiempo. Esta revista virtual les tiene preparado; eventos, notas, criticas, entrevistas, videos y escritos, además de nuevos redactores y redactoras, que verán si siguen recorriendo nuestra revista todas las semanas; secciones nuevas y otras completamente renovadas, para el disfrute de quien quiera y desee frecuentarnos en el momento que quiera, no prometemos oro… ni criptomonedas, pero si un espacio donde van a poder unirse, hacer comunidad, comentar con libertad y proponer. Y por sobre todo… Demás está decir que, está abierta la invitación a cualquier redactor, redactora Junior que quiera dar sus pequeños pasos comenzado a hablar/escribir de sus hobbies o sus pasiones en primera persona. O algún escritor experimentado que simplemente quiera ejercitar sus dedos para no perder la práctica, sin correr bajo deadlines de tiempos imposibles, o capaz interese a otras y otros ya en ejercicio y activos, con sus rutinas y columnas, que quieran sumar otro medio más amigable para contar cosas y vivencias a abrir nuevas puertas a escritos en los que puedan ser llamados “críticos no especializados”; te damos la bienvenida a Critica, te invitamos nuevamente… ¿te quedas?